El notición de este enlace merecía un regalo 100% personalizado. Así que me puse manos a la obra con los miniyos de los novios.
Y para darle un poco más de diversión añadí que los muñecos fueran articulados, algo que llevaba tiempo queriendo probar.
Os pongo algunas fotos de la elaboración por si alguna se anima.

Lo más complicado fue dar vida a los miniyos creando su esqueleto pero al final salió con la mezcla de imaginación y equivocarme varias veces.


Solo faltaban los complementos que les dan personalidad para disfrutar su historia.
La historia de un mago que encontró a la bailarina que le enseñó la verdadera magia de la vida.
La entrega de los regalos fue en el aperitivo que invitaron para celebrar todos juntos su felicidad.
Y el mejor complemento una tarta de Mar (pronto os hablaré de esta compañera que con sus manos y el fondant crea dulces espectaculares)
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